jueves, 17 de julio de 2014

Yo

Y de nuevo, otro fracaso…

Pero esta vez, he comprendido muchas cosas:

He comprendido
que no soy lo que quiero
ni quiero lo que soy.

He comprendido
que de mis propios pies nacen las zarzas
que me causan las heridas al andar.

He comprendido
que a pesar de un par de duros golpes
por parte de la vida,
puede que haya sido yo
quien ha imantado mi fortuna…
pues electrizando el aire con tanto pesimismo,
con mis ojos tan cargados de iones negativos,
es normal
que los cuervos se vieran atraídos.

He comprendido
que soy por tanto un perdedor,
porque prefiero echarle culpas
a las piedras cuando caigo,
cuando el problema está
en que siempre voy mirando atrás.

He comprendido, pues,
que a veces es la forma en que caminas,
y no el camino,
lo que te hace tropezar.

Pero lo peor es que sabiendo todo esto,
sigo aplastado bajo el peso de mí mismo;
pues no encuentro la manera de romper lazos con la luna…
No consigo reaccionar.

Ya sé que pocos gustan de leer
un poema tan lleno de imbecilidad y patetismo;
un poema que no trasmite confianza, seguridad ni esperanza,
o que no ofrece al lector
la cabeza de sus propios recuerdos
en bandeja de papel…

Pero necesito escribirlo,
porque estas sombras no se espantan
con un par de días en que todo salga bien,
ni con unas palmadas en la espalda,
ni aunque me digas a la cara
que espabile;
que soy un idiota, un llorón,
o un cobarde…

Lo asumo y entiendo todo ello:
la verdad ya no puede aceptar más sobornos
por parte de mi orgullo.

Mi único talento ha sido
mantenerme a flote
con los pies hundidos en cemento,
a costa de parasitar a quienes me quieren,
y buscar que me sigan soportando
para evitar que pase
lo que tiene que pasar.

Pero en fin, aquí sigo…
Tragando niebla negra.
Y silencio.

Sólo para ti.

miércoles, 16 de julio de 2014

De destrozos están las camas llenas, pero te he encontrado entre toda la mierda de este mundo y no pienso soltarte la mano aunque me pidas que te acaricie porque quiero volar contigo sosteniendo éstas inmensas ganas de hacerte cosquillas hasta que me mates de risa.

Me he mirado ésta mañana en el espejo y te he encontrado en mi pelo lacio, despeinado, enredado; manteniendo el equilibrio para brotar en mi pecho, 
para quedarte en mis clavículas; 
asumiendo el riesgo de que el 'pero' sea mi palabra favorita.

Tengo el punto de gravedad en tu ombligo y el miedo a ser valiente contigo por todos los que no han sabido serlo conmigo.

He visto un cuerpo húmedo y frío en la bañera; era yo,

sin ti.
Pero sonríe, joder, que todavía nos quedan muchas promesas que romper.
Y me parecen pocas.

Contigo la vida es menos larga y temblar se ha convertido en mi juego favorito desde que nos metemos mano en los autobuses y siento que tu erección es la dirección correcta.
No tengo ni idea del amor, pero sé que no necesitamos la distancia para acercarnos,
y sé que tus susurros suenan a guerra en mi espalda y sin previo aviso te pones más caliente que el sol cuando se asoma por mis ojos.

Cuando el amor falla lo único que quedamos somos nosotros follando.
Desnudos,
expuestos,
deshechos.

No dejes de sonreír mientras te corres porque eres la respuesta más acertada a la pregunta que no me hago y porque todas las cornisas se mueren de ganas de que te tires desde ellas.

Encima de mí.

Sé que suena raro, pero peor suenan las canciones cuando no me recuerdan a ti, quédate quieto que te disparo al corazón antes de tropezarnos con la ausencia de alguno de los dos y no podamos evitar pensar que nos hemos equivocado.

'Vamos a rompernos en mil pedazos, y a saltar por los aires' -me dices.
'Eres la diana perfecta'- pienso.

Tienes los pies fríos y yo un par de calcetines.
A lo mejor el amor es eso.
Pero mientras lo averiguamos, no pierdas la costumbre de ser mi viernes favorito de la semana.

miércoles, 9 de julio de 2014

Amargo ser




Su mente es un laberinto, agonía constante, inseguridades constantes, miedos constantes. 

Él por dentro es negro, podrido, seco.
Está perdido, arto, exhausto de correr y no avanzar.

Arto de chocar siempre contra el muro
Reniega al mundo cada acto, inconformista por naturaleza.

Cínico por consecuencias. 
Retorcido y amargo.
Arto de palos. Lo han hecho un ser negro, podrido, seco. 

Él es el caos en persona. 
Él no desprende luz, en su pecho tiene un enorme agujero negro que lo absorbe a si mismo

Es capaz de convertir todo lo que toca en caos

          Él estaba, ya no está.

martes, 8 de julio de 2014


Y yo me rindo, me quedo aquí a bajo.



Frágil. 
Hasta las sabanas hacen daño.
El roce con el colchón se convierte en dolor.

Y vuelvo a estar ahí a bajo, en el pozo. 
Oscuro, silencio ensordecedor.
La nada y yo. 
Estoy a bajo del todo, no me importa lo que haya arriba. 
Vuelvo a estar ahí a bajo, en el pozo.
Sola, oscuro, desnuda.
La nada y yo.

Frágil.
He vuelto a caer.
Sola, oscuro, desnuda.
Nada.

Frágil.
He vuelto a caer y no tengo fuerzas para levantarme. 
El dolor es tan grande que desaparece, y me conformo, me agrada, estoy bien.

Nada puede ser peor que el infierno y la nada oscura de aquí a bajo. 
El dolor va enmudeciendo.
Más es menos.
Me conformo, me agrada, estoy bien.

A veces casa es el infierno, oscuro y muy frío. Y yo me rindo. Me quedo aquí a bajo.

Sola.
Desnuda.
Frágil. 
Oscuro.
Nada.