Te siento como pájaro en jaula
reteniendo cualquier oportunidad de
dejarme echar a volar en tu boca.
Boca de sábana
de desayuno a las tres de la tarde
de ojeras de ego
y sabor a orgullo
(a orgulloso sexo).
Y que el amanecer lo vean otros que
hayan dormido toda la noche,
que a mí me sobran sueños
y me falta realidad que convertir en tu espalda.
Permíteme sentirte en verso
y besarte las entrañas
que nosotros siempre hemos sido de llevarle la contraria al mundo
y que el mundo
nos pusiera en contra del más común de los sentidos.
Déjame beber de la espuma que
provoca la cerveza de tu barba.
Emborráchame del alcohol de tus heridas
que ya me encargo yo
de sanarte el corazón.
Corazón de acorde
bombeando melodía entre mis piernas
componiendo mis lunares
callando a punta de guitarra todo síntoma de placer
como si alguna vez hubieras respirado mi inocencia.
Broncéame la nostalgia
que el recuerdo
ya no olvida
si es contigo.
Cómo le cuento yo ahora a la almohada
que estoy en huelga de silencio
desde que no te escucho en mis gemidos.
Que me vuelvo Luna
con tus manos llenas
Y que las medias son para las naranjas
y a mí
nunca me ha gustado la fruta
si no es prohibida.
reteniendo cualquier oportunidad de
dejarme echar a volar en tu boca.
Boca de sábana
de desayuno a las tres de la tarde
de ojeras de ego
y sabor a orgullo
(a orgulloso sexo).
Y que el amanecer lo vean otros que
hayan dormido toda la noche,
que a mí me sobran sueños
y me falta realidad que convertir en tu espalda.
Permíteme sentirte en verso
y besarte las entrañas
que nosotros siempre hemos sido de llevarle la contraria al mundo
y que el mundo
nos pusiera en contra del más común de los sentidos.
Déjame beber de la espuma que
provoca la cerveza de tu barba.
Emborráchame del alcohol de tus heridas
que ya me encargo yo
de sanarte el corazón.
Corazón de acorde
bombeando melodía entre mis piernas
componiendo mis lunares
callando a punta de guitarra todo síntoma de placer
como si alguna vez hubieras respirado mi inocencia.
Broncéame la nostalgia
que el recuerdo
ya no olvida
si es contigo.
Cómo le cuento yo ahora a la almohada
que estoy en huelga de silencio
desde que no te escucho en mis gemidos.
Que me vuelvo Luna
con tus manos llenas
Y que las medias son para las naranjas
y a mí
nunca me ha gustado la fruta
si no es prohibida.